Maximizar la productividad depende del ambiente; recorrer campos muestra aciertos y desafíos. Así lo destacó la jornada UPA de Aapresid en Bahía Blanca.
El establecimiento “La María Lidia”, en Coronel Pringles, fue sede de la jornada UPA organizada por la regional Aapresid Bahía Blanca. El evento comenzó con las palabras de bienvenida del presidente de Aapresid, Marcelo Torres, y de los anfitriones Claudio y Eduardo Sánchez, quienes destacaron la importancia de combinar conocimientos técnicos con experiencias de campo. La jornada se dividió en charlas en salón y un recorrido por los cultivos.
Durante el trayecto en campo, expertos abordaron temas clave como el uso de cultivos de servicios como antecesores del maíz y técnicas de siembra de este cereal, con la guía del ingeniero Guillermo Marrón. Asimismo, el ingeniero Juan Pablo Renzi explicó los momentos óptimos para sembrar Vicia villosa, mientras empresas especializadas presentaron avances en bioestimulantes para trigo. También se destacó la participación del ingeniero agrónomo Ramón Gijón, quien compartió novedades sobre el manejo de malezas.
En sus palabras, Torres enfatizó el rol fundamental de los cultivos de servicios en la integración agrícola-ganadera. Resaltó casos como el de Uruguay, donde pasturas cortas se alternan entre períodos de pastoreo y funciones como cultivo de servicio, brindando beneficios productivos y ambientales. Según Torres, estas prácticas no solo diversifican los sistemas productivos, sino que también promueven la sostenibilidad a largo plazo.
Otro aspecto destacado fue el potencial de los cultivos de servicios para actuar como puente forrajero y aumentar la producción de carne, profundizando la integración ganadera en lotes agrícolas. Esto, sumado a su capacidad de proporcionar servicios ecosistémicos, los posiciona como una herramienta esencial para productores que buscan eficiencia y sostenibilidad en sus sistemas.
Claudio Sánchez cerró la jornada subrayando el valor de recorrer los campos y observar los cultivos en escenarios reales. “Estas actividades permiten identificar errores de manejo, impactos climáticos y oportunidades de mejora”, señaló. Además, destacó que las jornadas UPA no solo generan aprendizajes, sino que fomentan el intercambio de experiencias entre los productores de la región.
