Los caballos de Karabaj, se originan en las estepas y montañas de la región de Karabaj, considerada una de las especies más raras del mundo, como así la más antigua de la región del Cáucaso, símbolo del Patrimonio Nacional de Azerbaiyán.
Los Karabajs son caballos enérgicos, rápidos y ágiles. Al mismo tiempo son muy robustos, resistentes y duraderos. Como caballos de montaña, tienen un paso muy seguro, como caballos de estepa, brillan con su velocidad y resistencia.
Su belleza, fuerza y gracia de los caballos de esta raza han inspirado a artistas, escritores y poetas.
Esta impresionante raza de caballos tiene una cabeza pequeña y bien definida, un perfil recto con una frente ancha y grandes fosas nasales. El cuello es de implantación alta, de longitud media, musculoso y elegante.
El color de la raza Karabaj puede ser rojo, espino cerval, marrón, bahía, gris o rojo dorado, que también se denomina brillo dorado.
Un juego de equitación tradicional de Karabaj en Azerbaiyán es el “chovgan” que es una forma antigua de polo moderno, considerado un deporte nacional.
Un deporte que se juega en un campo llano y cubierto de hierba entre dos equipos de jugadores que compiten montados a esta increíble raza.
El chovgan se originó a mediados del primer milenio de la era moderna, como un juego de equipos; siendo muy popular en el Medio Oriente y las reglas del juego se conservan hasta la actualidad, en manuscritos.
Varios grabados antiguos y cerámicas sugieren que el deporte tiene una larga historia allí.
En 2013, la práctica del chovgan en la República de Azerbaiyán, fue incluida en la Lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO.
El caballo Karabaj considerado por expertos entre las seis mejores razas del mundo 
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