Especialistas del INTA explican cómo enfrentar esta plaga que afecta al maíz. Recomendaciones clave para proteger los cultivos ante su rápida propagación.
La chicharrita del maíz, vector de enfermedades como el achaparramiento, se ha expandido debido a condiciones climáticas favorables y siembras escalonadas. Según el INTA, el manejo adecuado es crucial.
Diego Szwarc, investigador del INTA Reconquista, señala el aumento de la enfermedad del achaparramiento debido a la presencia de la bacteria Spiroplasma kunkelii, transmitida por la chicharrita. Destaca la necesidad de controlar la población de la plaga y eliminar plantas huéspedes.
Se recomienda la selección de variedades de maíz tolerantes a la plaga y ajustar las fechas de siembra para evitar la coincidencia con los picos poblacionales de la chicharrita. Además, se aconseja el uso de curasemillas para proteger los cultivos durante los primeros días.
Facundo Ferraguti, coordinador de la Red Nacional de Maíz del INTA, advierte sobre la presencia inusual de la plaga en latitudes más altas, lo que destaca la importancia de tomar medidas preventivas.
En cuanto a la aparición reciente de la plaga en San Luis, Belén Bravo del INTA San Luis insta a estar alerta y tomar precauciones, monitoreando de cerca las condiciones ambientales y eliminando plantas voluntarias de maíz.
La chicharrita del maíz, con su rápida reproducción y transmisión de enfermedades, representa una amenaza para los cultivos de maíz en Argentina. El control adecuado y la prevención son fundamentales para reducir su impacto.
