La financiación de los proyectos sera proveniente de bancos multilaterales de crédito y de fondos locales.
El gobierno nacional ha presentado un ambicioso plan para regar 19 millones de hectáreas en todo el país. Este proyecto tiene como objetivo aumentar la producción agrícola y mejorar la seguridad alimentaria en Argentina a través de 95 proyectos de infraestructura hídrica en 20 provincias. La inversión pública será de unos u$s 2.000 millones aproximadamente.
El plan contempla la construcción de una serie de infraestructuras de riego, como canales, embalses y sistemas de bombeo, que permitirán llevar agua a zonas que actualmente no cuentan con acceso a este recurso vital.
Además, el gobierno ha anunciado que trabajará en conjunto con los productores para implementar prácticas agrícolas sostenibles que permitan maximizar el uso del agua y minimizar los impactos ambientales.
“El Valor Bruto de Producción (VBP) de las cadenas involucradas tendrá un impacto global de u$s 4.413,6 millones, a la vez que la inversión privada traccionada por los proyectos será de u$s 3.232,3 millones”, informaron voceros de Economía.
“Con este plan estamos generando una política de estado estratégica y con carácter netamente federal; es una respuesta a largo plazo para combatir las consecuencias del cambio climático y prevenir los efectos negativos de la sequía”, añadió Jorge Neme, secretario de Planificación de Desarrollo y la Competitividad Federal.