Un estudio nacional analizó seis campañas y reveló cómo se produce en cada región.
El Instituto de Clima y Agua del INTA presentó un informe que analiza la secuencia de cultivos durante las últimas seis campañas agrícolas en Argentina. A través del Mapa Nacional de Cultivos, se identificaron miles de combinaciones, destacando las 20 más relevantes por superficie sembrada. Las cinco más frecuentes incluyen rotaciones entre maíz, trigo y soja.
Con una resolución de 30 metros, este mapeo permite observar el comportamiento productivo a nivel de lote y caracterizar diferencias regionales. El 35% del área agrícola, por ejemplo, presenta un solo cultivo por año, especialmente en zonas áridas como el oeste pampeano, Santiago del Estero y el este de Salta.
El estudio también mostró que en el 75% del área agrícola se sembraron al menos tres cereales a lo largo de seis campañas, lo que indica una tendencia a diversificar. Sin embargo, un dato llamativo es que en un 20% del territorio se cultivó soja de primera durante cuatro o más campañas, lo que plantea un posible riesgo de monocultivo.
Este trabajo no solo aporta transparencia sobre cómo se produce en Argentina, sino que también permite detectar oportunidades de mejora en la planificación agrícola. Más de 30 unidades del INTA participaron del relevamiento, aportando conocimiento local clave y generando una base de datos histórica de gran valor para el país.