En INTA Famaillá, Tucumán, se investiga el uso de Trichopria anastrepha para combatir la mosca de alas manchadas y la mosca africana del higo.
La mosca de las alas manchadas, plaga originaria del sudeste asiático, amenaza a las frutas finas como frutillas, arándanos y frambuesas en Argentina. Los expertos del INTA Famaillá trabajan arduamente en estrategias de control biológico para contrarrestar los daños causados por esta especie invasora.
En un estudio realizado en ambientes controlados, el equipo de investigación logró demostrar la efectividad del parasitoide Trichopria anastrepha para combatir con éxito tanto la mosca de alas manchadas como la mosca africana del higo. Claudia Funes, especialista del INTA, destacó que este método alcanzó un control del 100% sobre Drosophila suzukii y del 40% sobre Zaprionus indianus, con un porcentaje del 50% de recuperación del parasitoide adulto. Estos resultados prometedores abren nuevas perspectivas en el manejo integrado de plagas en la agricultura argentina, promoviendo la sustentabilidad y el cuidado del medio ambiente.