INTA promueve en el sur tucumano un sistema eficiente y de bajo costo para engorde porcino, con menor impacto ambiental y sin necesidad de grandes inversiones.
En el sur de Tucumán, el INTA impulsa la adopción del sistema de cama profunda para el engorde de capones. Esta tecnología permite mejorar la productividad de las granjas porcinas sin necesidad de grandes inversiones, y se presenta como una alternativa viable para zonas marginales.
Los ensayos fueron desarrollados por la Agencia de Extensión Rural Graneros, en articulación con especialistas de la Estación Experimental Marcos Juárez, Córdoba. Allí comprobaron que la cama profunda alcanza indicadores productivos similares a los de un sistema confinado, pero con menor complejidad y un impacto ambiental reducido.
El sistema consiste en construir galpones con materiales accesibles —como madera, caña o hierro— y un piso de tierra compactada, donde se coloca una cama de rastrojos vegetales como malhoja de caña, pasturas o residuos de cereales. Estos materiales absorben los residuos y, al descomponerse, pueden usarse como abono en cultivos como el maíz.
“La alta disponibilidad de insumos locales permite que sea una opción de bajo costo y fácil implementación para productores pequeños y medianos”, destacó Isabel Arellano, técnica del INTA Graneros. Además, los ensayos mostraron mortalidad inferior al 1,5 % y buena adaptación de los animales, sin signos de estrés.
Desde el INTA subrayan que esta tecnología, además de reducir el uso de agua y efluentes, fomenta una producción porcina más sostenible y rentable, con potencial para ampliar el engorde de capones a escala regional.
FUENTE : https://intainforma.inta.gob.ar/innovacion-para-el-engorde-de-capones-en-granjas-porcinas/



